En el pequeño comercio siempre hemos de tener un «plus» añadido por tanto la frase «ofrezcamos más de lo que esperan» no ha de ser simplemente una frase, ha de ser un concepto.
En los comercios de barrio la relación con los clientes es muy personal, lograr que se vayan satisfechos ha de ser una norma y ver que algunos salgan de la tienda pensando o diciendo que les hemos ofrecido más de lo que esperaban.
Lograr que el cliente se sienta más que satisfecho es cumplir un difícil objetivo que cuando se logra produce la satisfacción de creer que se ha plantado una simiente para que esa tienda pueda seguir trabajando y consolidándose.
Las tiendas necesitan ingresos, mantenimiento de puestos de trabajo, ofrecer mercancías adecuadas y sobre todo satisfacer necesidades de los clientes cuando necesitan de nuestros servicios.
La palabra marketing también existe en los pequeños negocios, principalmente cuando ofrecemos productos y servicios que satisfagan a nuestros clientes.
El mutuo respeto entre los clientes y el personal que sirve en una tienda o negocio de servicios es fundamental para que el grado de satisfacción sea excelente y con esa premisa siende se puede ofrecer más de lo que esperan de nosotros.
Si eso ocurre el exito está garantizado y la supervivencia del negocio tendrá muchas más posibilidades.
En un mundo en el que parece que la amistad pueda no ser apreciada el tener «amigos» a quién ayudar, solucionar problemas o simplemente aconsejar hace que las tiendas de barrio sean imprescindibles.
Siempre existe una puerta en las tiendas, será un exito cuando nuestros clientes la cruzen con tranquilidad, alegría e ilusión.